Tempos de Paz

Tempos de Paz (2009)

Dir: Daniel Filho

01:20

Orígen: Brasil

Estaba acostumbrado, con todas las películas que vemos aca que trascienden del cine brasilero, a esperar otra cosa del mismo. Lo que se espera en general es algo crudo, violento y realista, pero en este caso Tempos de Paz es una película que si bien trata temas profundos y durísimos, lo hace de una manera mucho mas teatral.

La historia es muy pero muy sencilla, tenemos por un lado un barco repleto de inmigrantes que vienen escapando de la segunda guerra mundial, estando ésta finalizada de hecho pero no de manera formal. El barco está arribando al puerto de Rio de Janeiro, y quienes viajan en el se encuentran rebosantes de ilusión, de comenzar una vida nueva, trabajar libremente bajo el sol de un país que les permita desarrollarse sin ser perseguidos y terminar sus vidas lejos de los dolorosos recuerdos que traen consigo.

En ese barco viaja Clausewistz, uno de los protagonistas de esta historia, quien habla muy bien el portugués a pesar de ser polaco, y se identifica en migraciones como agricultor. El dominio del idioma del forastero atrae la atención de los agentes de aduana de Brasil, por lo que llaman a un oficial para interrogarlo, cuyo nombre es Segismundo.

En otro orden de cosas la historia nos lleva también a la liberación de un grupo de comunistas que salen de prisión gracias a una amnistía que propone el presidente en el dia de su cumpleaños. Son tiempos de paz, dice el mandatario y por eso perdona a quienes tomaron acciones en su contra. Sin embargo, han vivido años de tormento y torturas que no pueden dejar atrás.

La historia va entonces en torno a estas dos situaciones, que luego veremos están de alguna manera relacionadas, para arribar a un final lleno de conclusiones.

Básicamente la película trata sobre los roles que cada uno ocupa en su vida, y como en tiempos de paz el torturador tiene que convivir con el torturado, cada uno con sus dolores, recuerdos y rencores. Cuando esos roles se reformulan es cuando sobreviene el entendimiento y la tolerancia de algunos, y en el medio, el arte como modo de expresión de los oprimidos, toma un rol fundamental en la película.

Las actuaciones son excelentes pero la película carece completamente de acción, más bien parece una obra de teatro llevada al cine y por momentos los diálogos se hace un tanto tediosos y pesados. No la recomiendo a pesar de que encuentro virtudes en ella y en su contenido, con un mensaje final alentador.

TRAILER